Enrique del Rivero 5 de noviembre, 2020 · 2 minutos
Junto a un pronunciado meandro del Cañón de Ebro se localiza el pueblo de Escalada con su iglesia de Santa María la Mayor en lo más alto. De su primitiva fábrica de estilo románico, el resto mejor conservado y de más bella factura artística es su portada. Fechada en el último tercio del siglo XII, destaca por la elegante y fina decoración que adorna sus perfectas arquivoltas de medio punto. También son llamativos los restos de pinturas que decoran la fachada principal del templo.
En el verde atrio de la iglesia de Escalada, elevado sobre una terraza desde la que se divisa buena parte del noble caserío de la localidad y del bello entorno paisajístico, llama la atención una atrayente portada. Sin duda, una de las más interesantes joyas románicas que se asoman al Cañón del Ebro.
Si su fecha de construcción gira en torno al último tercio del siglo XII, en su factura se aprecian influencias de distintos talleres y grupos románicos castellanos. Aunque las más claras proceden de la llamada escuela de Las Huelgas, también se pueden apreciar, especialmente en la temática del principal conjunto escultórico, el peso de los talleres de Aguilar de Campoo, Sedano e, incluso, Silos.
Doce columnas —seis a cada lado— que descansan sobre sendos bancos, sostienen las perfectas arquivoltas que forman la portada. En el arco más cercano a la puerta aparecen esculpidos los Ancianos del Apocalipsis. Su iconografía se aleja algo de los cánones convencionales ya que la figura central es un sacerdote con un cáliz en las manos, en vez del tradicional ángel.
El resto de los Ancianos muestran en sus manos los clásicos elementos de su representación escultórica: instrumentos musicales de cuerda, viento y percusión, libros y ampollas de perfume. Las otras arquivoltas están decoradas a base de baquetones, sogueados, puntas de diamante y, en el caso de la más externa, de finos calados de hojas y tallos vegetales.
En los capiteles se pueden ver, entre otras escenas, arpías enfrentadas, guerreros luchando, un jinete matando a un monstruo con alas y dos cuadrúpedos devorando a un cordero.
Para acercarse hasta Escalada hay que enlazar, desde la ciudad de Burgos, con la carretera de Santander, N-623, que enfila hacia el Puerto del Escudo. Tras cruzar el río Ebro por el puente de Quintanilla Escalada se localiza, a mano izquierda, el cruce por el que enseguida se alcanza este pueblo. La iglesia está a la salida con dirección a Orbaneja del Castillo