Enrique del Rivero 15 de enero, 2021 · 3 minutos
Con permiso del mirador de Poza de la Sal, el del Portillo de Busto es el mejor lugar para disfrutar de los paisajes de La Bureba. Este privilegiado belvedere se localiza a mil metros de altura en una de las cumbres de los Montes Obarenes, el alargado murallón rocoso que perfila por el norte esta personalísima comarca burgalesa. Cualquier época es buena para asomarse hacia sus infinitas panorámicas, pero, si el invierno viene cargado de nieve, la experiencia se convierte en única e inolvidable.
La Bureba presenta unos límites geográficos muy bien definidos —sobre todo, como hemos mencionado, el septentrional murallón rocoso de los Montes Obarenes— que perfilan una perfecta y modélica cuenca sedimentaria drenada por el curso del río Oca y sus afluentes. Su paisaje, una especie de “Castilla en miniatura”, luce la huella de una secular ocupación humana que ha ido ganando terreno al bosque de encinas y quejigos, para poder roturar sus fértiles campos de cereal. La personalidad de su historia, la riqueza de su arte y la tradición popular que conservan todos sus pueblos, convierten a La Bureba en uno de los más interesantes espacios de Castilla y León.
Si el confín meridional de los Montes Obarenes está delimitado por la perfecta y llana cuenca sedimentaria de La Bureba, el sinuoso trazado del río Ebro conforma su borde más septentrional. Todo este conjunto montañoso caracterizado por un apretado conjunto de estrechos y fracturados anticlinales y sinclinales está incluido dentro de la Red de Espacios Naturales de Castilla y León con la denominación de Parque Natural Montes Obarenes-San Zadornil.
Vistos desde La Bureba, los Montes Obarenes muestran un definido perfil en el que sobresalen los siguientes hitos orográficos: el desfiladero del río Oca, la Mesa de Oña, el Pan Perdido –con sus 1.237 metros es la máxima altura de la zona–, el Portillo de Busto, el Galdampio, el pico Buey y el desfiladero de Pancorbo.
Al Mirador del Portillo de Busto se accede caminando por un corto sendero que asciende desde un señalado aparcamiento. Desde la protectora baranda de madera se divisa la más extensa panorámica de La Bureba. En un día claro, justo enfrente, aparece, como impresionante telón de fondo, el perfil inconfundible y completo de la Sierra de la Demanda. Un panel informativo nos señala los principales hitos del paisaje.
Para disfrutar del mirador del Portillo de Busto lo mejor es enlazar a la altura de Cubo de Bureba —se llega desde Burgos por la N-I y si se utiliza la antigua autopista hay que tomar la salida de Briviesca— con la carretera N-232 con dirección a Santander. Cerca de Busto de Bureba es necesario desviarse por la BU-504 que, con dirección a Frías, asciende hasta el Portillo de Busto.